Las dos últimas guitarras clásicas que estoy construyendo en lo que nos queda de año ya van tomando forma.
Sigo con el método de construcción tradicional y el modelo del maestro Antonio de Torres, buscando ese sonido rico e íntimo de las guitarras que junto al guitarrista y su emoción forman un todo perfecto, y la máxima comodidad para el instrumentista en su ejecución.
Estoy preparando dos guitarras, una con una tapa de Pinoabeto Alemán con muchos años y mucha historia que viene desde Cádiz, y fondo en tres piezas de Palosanto India y Granadillo, y con una roseta espectacular hecha a mano con mimo por Miguel.
Y la segunda guitarra con la tapa de Cedro Canadiense de color chocolate, y el fondo en tres piezas de Palosanto Madagascar y Granadillo. Un Granadillo que en las dos guitarras me lo regaló un buen amigo del taller.
La roseta esta vez es un diseño personal inspirado en el juego Tangram, con incrustaciones de Granadillo y Haya, y en tres partes como ya viene siendo habitual en mis diseños de este año.
El resultado en ambas será espectacular.
No perdáis el hilo!